Procesión extraordinaria de San Rafael, Custodio de la Ciudad de Córdoba con motivo del Año de la Fé

"Los siglos, los años, los días, las personas pasarán, pero Él siempre estuvo, está y estará para salvaguardar la ciudad más hermosa del mundo..."

67 años hace de la última vez que piso las calles de su ciudad. Tanto años, que sólo quedan en la memoria de las personas más ancianas, y que aun así, no alcanzan a recordar la solemnidad de aquel día. Pero que cosas del destino, que nos vuelve a dignar con tan bella imagen ante nuestros ojos. San Rafael, el eterno Custodio de la ciudad de Córdoba, volvió a procesionar, aunque de manera extraordinaria. Dicha procesión se debe al año de la Fé, promovido en las Jornadas Mundiales de la Juventud por su Santidad, El Papa Benedicto XVI. Numerosos eran los cordobeses que no se quisieron perder esta cita tan especial. La venerada imagen partió desde su iglesia del Juramento, a eso de las 18:30 horas del Sábado día 20, pasando minutos después por la puerta de la feligresía de San Lorenzo, donde la Hermandad del Remedio de Ánimas había instalado un altar en su honor. Las emociones estaban a flor de piel en un día tan especial como este. Prosiguió su marcha rumbo a la Basílica de San Pedro, donde se celebraría un solemne acto ante la capilla de los Santos Mártires. Tras dicho acto, la imagen partió ya definitivamente hacia la Santa Iglesia Catedral, donde durante los próximos tres días se celebrará un solemne triduo extraordinario en su honor. Así mismo, el día 24 de Octubre, fecha de su festividad, la imagen regresará por la mañana a su sede, recibiendo todos los honores del ayuntamiento a su paso por el mismo. Además, tanto en la procesión de ida como en la de vuelta, la imagen será acompañada por miembros de dicho ayuntamiento, entre los que se encontraba el Alcade de la ciudad. Los acompañamientos musicales corrieron a cargo de la Banda de CC y TT de Ntra. Sra. de la Salud, de Córdoba abriendo el cortejo y de la Banda de Música de María Stma. de la Esperanza, de Córdoba, tras el paso del Custodio, interpretando un selecto repertorio de marchas procesionales cordobesas.

"Yo te juro por Jesucristo Crucificado que soy Rafael a quien Dios tiene por Guarda y Custodio de esta Ciudad de Córdoba"